Capítulo 159
Capítulo 159
Capítulo 159
Kathleen dijo con desden:
-¿Insinuas que no esperabas que tuviera lans?
-Esa pelicula no se estrena hasta la semana siguiente-dijo Charles en tono grave-. Aunque hayas conseguido un premio de antemano, la gran mayoria del público aun no te ha visto en pantalla, asi que no has pedido conseguir tantos fans. Cuando hayan visto tu actuación y tengan una buena impresión de ti, solo entonces se ampliará tu base de fans. Si no, todos ellos son meros fans ocasionales y no te sirven de nada.
Kathleen se quedo sin palabras.
Aunque los espectadores de la sala de chat seguían alborotados, la actuación ya habia comenzado en el escenario.
Habian sorteado el orden, y la actuación del equipo LR seria la ultima.
Hasta el momento antes de que el Equipo LR subiera al escenario, Samuel aún no habia repartido la tarjeta dorada que tenia en sus manos. Parecia que conseguir la tarjeta dorada era una hazaña dificil de lograr. Además, todos los comentarios de Samuel habian sido directos y duros.
Cada vez que hacia sus comentarios, nadie se atrevia a pronunciar una palabra.
Para una persona con un aura imponente como él, dondequiera que fuera, suprimia de forma involuntaria la presencia de la gente que le rodeaba. Era inevitable.
En ese momento, alguien llamó a la ventanilla del coche.
Charles miró de reojo a la persona junto a la ventana y dijo:
-Es hora de irse.
Kathleen asintió.
Se puso una chaqueta, salió del coche y siguió al empleado entre bastidores.
En su camino, fueron muy cautelosos para que nadie los viera.
Cuando llegaron a los bastidores, Kathleen se quitó la chaqueta y se preparo para seguir con su actuación.
El miembro del personal le ayudó a ponerse un auricular.
La primera era una joven, aparentemente un poco mayor que Kathleen. Mirandola, estaba algo emocionada. Incluso le temblaban las manos.
Kathleen estaba muy atractiva con su maquillaje ese día, y sus rasgos eran impecables.
De repente, Kathleen le dedicó una sonrisa a la joven.
El corazón de esta última se derritió en un charco de inmediato.
«Cómo puede tener una sonrisa tan pura como un angel?
Después de que la joven terminara todo, pronunció con timidez:
-Su… buena suerte.
-¡Gracias! -dijo Kathleen con una dulce sonrisa. Contentt bel0ngs to N0ve/lDrâ/ma.O(r)g!
Al ver su sonrisa, la joven casi se desmaya. Luego se alejó con paso inseguro.
Mientras tanto, Kathleen estaba lista para salir.
Cuando comenzó la música, subió a la plataforma desde los bastidores.
Al principio, todos vieron sólo una silueta y no pudieron saber quién era la persona. Al acercarse a los focos, el público se dio cuenta al instante de que la figura era la propia Kathleen. Fue entonces cuando el público entró en un estado de frenesi.
Ese dia Kathleen iba muy arreglada, con un aspecto elegante y deslumbrante. Llevaba un top de cuero negro con tirantes anchos y unos pantalones cortos de cuero negro. Sus esbeltas y largas piernas llevaban un par de botas hasta el muslo. Con un exquisito maquillaje de ojos ahumados, desprendia un aire de indescriptible salvajismo y sensualidad.
Mientras exhibía sus rápidos y agudos movimientos de baile, cada una de sus expresiones y posturas estaban inundadas de encanto y belleza. Sus interacciones con las otras celebridades masculinas también resultaron elegantes y gallardas. No habia ni un ápice de chabacaneria en sus movimientos.
Al ver la actuación de Kathleen, el público se volvió completamente loco, por asi decirlo. Casi habían olvidado que estaban allí para ver a las celebridades masculinas competir en un concurso de talentos.
Sentado en el panel de jueces, Samuel observó a Kathleen con una mirada intensa y fria como el hielo.
«¡Qué belleza!
Bajo las deslumbrantes luces, era como si Kathleen brillara. Ese día, se convirtió en la diosa del corazón de todos los hombres.
Una ardiente sensación de posesividad golpeó poco a poco a Samuel. Deseaba llevársela y ocultarla de los ojos de otros hombres. Se esforzo por contener su emoción y reprimir su deseo, pero en el
fondo la anhelaba.
«Kathleen. ¡Mi única Kathleen!¡Desearia poder tenerla en mis manos ahora mismo!>>
La música al fin se detuvo.
Asi termino la actuación perfecta de Kathleen. Se tomo de la mano con Skyler y Mason, y se inclinaron juntos ante el publico como gesto de agradecimiento.
El sonido de los aplausos llenó el aire sin parar.
Pronto, el presentador apareció en el escenario y comento:
-¿Quien iba a esperar que la invitada especial del equipo LR fuera Kate?
Kathleen esbozó una leve sonrisa.
-Vamos a ver que dicen nuestros jueces -añadió el presentador.
Los jueces estaban tan satisfechos con la actuación del equipo LR y Kathleen que les dieron una puntuación muy alta. El equipo I, y otro grupo acabaron empatados en el primer puesto. Al final, todo se redujo al voto de Samuel
El ambiente se volvió silencioso.
Todo el mundo sabía de la relación entre Samuel y Kathleen. Por eso, les preocupaba mucho que Samuel no fuera justo al dar su calificación.
Algunos de ellos pensaban que Samuel podria conceder al grupo una puntuación altisima, mientras que los otros temían que diera una puntuación terriblemente baja. Habia todo tipo de pensamientos contradictorios en la multitud.
Kathleen también estaba un poco nerviosa, pues no estaba segura de que Samuel fuera a ser justo.
Desde su punto de vista, existia la posibilidad de que la mezquindad de Samuel actuara de repente.
-Sr. Macari, ¿qué le parece nuestra última actuación?-preguntó el anfitrión con tranquilidad.
La multitud se volvió para mirarle.
Samuel, por su parte, observó a Kathleen con atención y comentó:
-El baile estuvo bien.
Frunciendo los labios, Kathleen expresó su gratitud:
– Gracias por el cumplido.
-Debes trabajar más. –El tono de Samuel apestaba a frialdad.
Aterrada por un instante, Kathleen respondió entonces:
-S-Si.
De repente, Samuel dirigió su mirada impasible al anfitrión.
-No todo el mundo puede llamarla Kate. ¿Eres tan cercano a ella?
Todo el mundo se calló con esa nota.
«Entonces, ¿se quedó callado hace tiempo sólo porque le molestaba esto?»
Samuel continuó con un tono gelido:
-Creo que es mejor que no vote. De lo contrario, algunos me acusarían de ser parcial.
Después de decir eso, Samuel dejó la carta dorada en sus manos.
Kathleen miro a Samuel, y éste entrecerro los ojos hasta convertirlos en rendijas.
–Intenta decir que esta tarjeta dorada estaba supuestamente destinada a ser entregada al equipo LR. Sr. Macari? -El presentador no tuvo más remedio que seguir con la presentación.
Samuel dio una respuesta indiferente:
-Esto es para evitar cualquier malentendido.
Kathleen se quedó sin palabras.
«¡Solo invitará a las especulaciones si no da esa tarjeta! >>
-Sr. Macari, por su forma de hablar, ya sabemos a que atenerse. Los otros grupos no estarán encantados, de todos modos -dijo uno de los jueces con indiferencia.
-En efecto, he tomado mi posición. -Lanzando una mirada a Kathleen, Samuel explicó-: La razón por la que no doy la tarjeta dorada es para salvar a todos los demás de la vergüenza. Después de todo, es obvio que son buenos.
Todos los demás se quedaron mirando a Samuel. Mostrando una media sonrisa, continuo:
-Además, el invitado especial del ultimo grupo es excepcional en todos los aspectos.
-¿Quiere decir que la Sra. Johnson es muy encantadora, Sr. Macari? -Aquel juez parecia insinuar algo.
Poniendo una mirada inexpresiva, Samuel respondió:
-¿No es ya de dominio público que la estoy cortejando ahora mismo? ¿A dónde quieres llegar con esta conversación?
Aloir esto, el juez se quedó sin palabras.
Kathleen fijó su mirada en Samuel. «¡En realidad es él quien está haciendo una escena aqui!>>
El anfitrión se sonrojó ante el repentino giro de los acontecimientos.
-¡Muy bien! ¿Quién hubiera imaginado que se produciria un empate en el primer puesto de nuestro espectáculo? De todos modos, muchas gracias por ver nuestras actuaciones de hoy. Anunciaremos la lista de nombres de la eliminación en privado. Gracias por su participación.
Cuando el presentador terminó su última frase, el concurso de esa noche también llegó a su fin.
Kathleen se dio la vuelta y se preparo para salir. En ese momento, Samuel se acercó a ella y la agarro de la mano por detras. La arrastro al otro extremo del escenario para salir.
Los espectadores estaban conmocionados, mientras que la expresión de Charles se ensombrecia.
«¡Ya he tenido suficiente de ese Samuel!>>
Samuel remolcó a Kathleen hasta el exterior. Cuando llegaron al aparcamiento, Samuel metió a Kathleen en su coche antes de subir el mismo al vehículo. Después, se quitó la chaqueta y envolvió a Kathleen con ella.
Kathleen le miro perpleja.
-¿Que diablos estás haciendo?
Mirandola a los ojos, Samuel bajó la cabeza y apretó los labios contra su piel.
Había besado ligeramente por encima de su ojo.
Kathleen se quedo atonita.
–Nunca mires a otros hombres de esa manera. -La voz de Samuel era ronca-. Sabes, he estado deseando sacarte del escenario desde hace un momento.
-¡Has roto las reglas, Samuel! -Kathleen se desbordó- ¿No acordamos permanecer como amigos intimos?
-Las reglas están hechas para romperse. –Pellizcando su barbilla, Samuel dijo-: Si no hubiera sido por la actuación de hoy, no me habría dado cuenta de que tanto queria que fueras mia.