Capítulo 509
Capítulo 509
Después de que Matilda se marchó, Leonardo ordenó a sus hombres para que vigilaran la sala y le avisaran inmediatamente si había algún problema con Antonia,
Se disponia a regresar a Bahia de los Olmos, y de repente sono su teléfono móvil,
El hombre dijo con pánico.
-¡Señor Ramos, se han llevado a Tadeo!
Preguntó Leonardo. -¿Qué ha pasado?
-Poco después de que te fueras, nos dejaron inconscientes, y cuando volvimos a despertar, el sótano
estaba vacio excepto los cuerpos de los dos hombres, ¡y Tadeo desapareció! Content is © 2024 NôvelDrama.Org.
-¡Revisa la cámara de seguridad, hay que encontrarlo!
-¡Si!
Colgando el teléfono, Leonardo llamó inmediatamente a Carlos.
-¿Cómo va lo de los tipos que te pedí?
-Señor Ramos, están listos para arrestarlo.
-¡Ahora que encuentren a toda la gente que Noche Fría metió en Monteflor!
-De acuerdo, les aviso de inmediato.
La expresión de Leonardo se volvió fría.
Si no se equivocaba, los que se llevaron a Tadeo debían ser los de Noche Fría.
Tadeo estaba tan arrogante y atrevido e hizo tantas cosas porque la gente de Noche Fría le estaba
ayudando.
Mientras las fuerzas de Noche Fría estuvieran desarraigadas, Tadeo no tendría más oportunidades de
hacer daño a la gente de la familia Ramos.
En una planta química abandonada en las afueras de la ciudad.
-Señor Kalor, ¿por qué sacó a Tadeo? Ya es inútil.
Capítulo 509
Después de que Matilda se marchó, Leonardo ordenó a sus hombres para que vigilaran la sala y le avisaran inmediatamente si había algún problema con Antonia.
Se disponía a regresar a Bahía de los Olmos, y de repente sonó su teléfono móvil.
El hombre dijo con pánico.
-¡Señor Ramos, se han llevado a Tadeo!
Preguntó Leonardo, -¿Qué ha pasado?
-Poco después de que te fueras, nos dejaron inconscientes, y cuando volvirnos a despertar, el sótano
estaba vacío excepto los cuerpos de los dos hombres, ¡y Tadeo desapareció!
-¡Revisa la cámara de seguridad, hay que encontrarlo!
-¡Sí!
Colgando el teléfono, Leonardo llamó inmediatamente a Carlos.
-¿Cómo va lo de los tipos que te pedí?
-Señor Ramos, están listos para arrestarlo.
-¡Ahora que encuentren a toda la gente que Noche Fría metió en Monteflor!
-De acuerdo, les aviso de inmediato.
La expresión de Leonardo se volvió fría.
Si no se equivocaba, los que se llevaron a Tadeo debían ser los de Noche Fría.
Tadeo estaba tan arrogante y atrevido e hizo tantas cosas porque la gente de Noche Fría le estaba
ayudando.
Mientras las fuerzas de Noche Fría estuvieran desarraigadas, Tadeo no tendría más oportunidades de
hacer daño a la gente de la familia Ramos.
En una planta química abandonada en las afueras de la ciudad.
-Señor Kalor, ¿por qué sacó a Tadeo? Ya es inútil.
Kalor se moto. -¿Cómo sabes que es inútil? Tadeo es el cuchillo que usamos contra la familia Ramos, si perdemos este cuchillo, tendremos que lidiar con la familia Ramos por nosotros mismos, y entonces
quedaremos expuestos.
Al oir esto el hombre bajó la cabeza avergonzadamente. -Soy demasiado estúpido.
Kalor miró con repugnancia a Tadeo, que estaba cubierto de sangre e inmóvil en el suelo.
–Lo mandas a que lo curen de sus heridas, y cuando esté curado, lo mandas de vuelta a Monteflor para que continúe la lucha contra la familia Ramos.
-¡Si!
Cuando estaba a punto de llevarse a Tadeo, otro hombre llegó corriendo.
-Señor Kalor, la red de fuerzas que montamos en Monteflor fue descubierta por Leonardo, ¡y ahora sus hombres están acabando con los nuestros!
Kalor guardó silencio unos segundos, y luego soltó una carcajada aterradora.
-Es el rey sin corona de Monteflor, dilos que se retiraran de Monteflor.
Dudó un poco, -Pero nos llevó tanto tiempo desarrollar nuestro poder en Monteflor…
Antes de que pudiera terminar la frase, tembló y bajó la cabeza al ver la gélida mirada de Kalor.
-¡Si, voy enseguida!
Cuando se marchó, Kalor miró en dirección a Monteflor.
-¡Leonardo, volveremos a vernos!
A las doce de la noche Leonardo recibió una llamada de Carlos.
-Señor Ramos, los hombres de Noche Fría habían huido al darse cuenta de que habían sido descubiertos y ahora no aparecían por ninguna parte.
Leonardo asintió con indiferencia, -Sigue averiguando dónde están Tadeo y el Grupo mercenario de
noche fría.
-Bien, por cierto, ¿qué hacemos con la caja fuerte que le quitamos a Tadeo?