Resistiendo al amor de Mi Ex-Marido

Capítulo 0205

Probablemente vió la esa escena en la que Carlos la detuvo.

Bella no creía que fuera necesario explicarle a Pedro, después de todo, él era mucho más cercano a Anna.

Él nunca explicaba, ¿por qué ella debería hacerlo?

-Vamonos. ordenó Bella al conductor.

El conductor giró la cabeza hacia Pedro, esperando su indicación. NôvelDrama.Org holds text © rights.

Pedro apartó la mirada y le hizo señas al conductor para que condujera.

Luego le preguntó a Bella: -¿Saliste a encontrarte con Carlos de nuevo?

-No hables con tanto celo respondió Bella-. Tú y Carlos no se llevan bien. ¿Qué tiene que ver conmigo? ¿Por qué no puedo verlo?

Pedro respondió: -Bella, ¿no puedes hablar bien conmigo?

Bella respondió: -Lo siento, cariño, soy rencorosa y no puedo hablar bien contigo.

Efectivamente, no era posible replicar el tono coqueto de la llamada telefónica.

Pedro decidió no discutir más con Bella por este asunto y preguntó: -¿Te ha pasado algo? ¿ Carlos te ha causado problemas?

De cualquier manera, Pedro estaba interviniendo a tiempo.

Bella decidió no discutir más y dijo: -Es una tontería, no es un gran problema.

Carlos la llamó con malas intenciones, pero aún tenía lo que ella quería en sus manos, y Bella no podía pelear con él por eso.

-¿Por qué me llamaste? -preguntó Bella en respuesta.

Pedro sabía que Bella no estaba diciendo la verdad.

También sabía que si Bella no quería hablar, incluso si la presionaba, ella no diría nada..

Dejando de lado la sensación incómoda en su corazón, Pedro preguntó: -¿Qué pasa con tu hombro? ¿Está bien?

-No, ni siquiera conduje el auto.

Y ahora ella valoraba su vida mucho y obedecería completamente las indicaciones médicas.

-¿Solo por eso? -preguntó Bella confundida.

Pedro respondió: -Mi padre regresará al país, ¿te lo dijó mi abuela, verdad?

Bella asintió con la cabeza y dijo: -Lo mencionó. ¿Va a regresar hoy?

Aún faltan dos días.

Continuó Pedro: -No se siente cómodo en la casa ancestral, y Villa Romero ha estado deshabitada por mucho tiempo, solo hay una empleada de limpieza allí. Probablemente.

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tengamos que ir y hacer los arreglos necesarios.

Así que era por eso.

-No voy a ir. -decidió Bella, tomando la actitud de despreocupación.

-Nunca he conocido al presidente Romero y no tengo idea de sus hábitos de vida. No puedo ayudar en nada. Además, mi hombro me duele mucho y no quiero estar corriendo de un lado a

otro.

-Tu hombro no te molestó cuando viniste a buscar a Carlos, ¿por qué te dolería ir a Villa Romero? -dijo Pedro.

Bella respondió: -También me duele. Por eso quiero regresar temprano y descansar.

La expresión de Pedro empeoró y comenzó a preocuparse por otra cosa: -¿Cómo lo llamaste a mi padre?

-Presidente Romero, ¿no es el presidente de Grupo Romero ahora? -dijo Bella, y luego se dio cuenta-. Tranquilo, hasta que nos divorciemos, todavía lo llamaré papá.

Divorcio, divorcio, siempre hablando de eso. Pedro se sintió extremadamente molesto.

-Bella, la abuela va a cumplir años pronto, ¿puedes dejar de mencionar divorcio y evitar problemas para todos?

Era un momento de alegría familiar, y definitivamente no era adecuado decir algo así.

Según escuchó de la abuela, el señor Romero tampoco estaría en el extranjero por mucho tiempo. 8