Capítulo 704
Capitulo 704 Tras comer una manzana, la enfermera entré para ponerle suero a Nina.
Antonio atin llevaba su bata blanca, tenia que volver a su departamento para terminar su turno. Marisol sallé de la habitacién con él, mummirando, “Donde se habra metido Gisela? Fue por una medicina y atin no regresa!”
Hablan salido juntos del ascensor y la farmacia estaba en el primer piso, incluso subiendo las escaleras ya deberia haber vuelto! Con el cefio fruncido, su mano colgante de repente fue tomada.
Marisol se sobresalto, bajo la mirada y vio su mano envuelta firmemente en la gran palma de él, sus dedos entrelazados, el calor de ambos mezclandose.
En frente, una enfermera y un paciente pasaban. Ella intento soltarse, pero él la sostenia con fuerza, y recordando que su relacion en el hospital ya no era un secreto, simplemente dejé que la llevara, aunque bajo la mirada con timidez.
Pensando en algo, pregunto con preocupacién, “Antonio, gcdmo va la recuperacién de Hazel?”
“Mhm,” asintio Antonio, y al hablar de la condicién médica, su tono perezoso se tom6 serio, “la trasplantacidn de médula 6sea no deberia ser dafiina tedricamente para el donante, y se puede dar de alta dos dias después de la cirugia. Puede haber dolor y fatiga en diferentes grados, pero con descanso se alivia. Hazel tiene una constitucion fuerte y su sistema inmunitario no ha disminuido, ha vuelto a su estado fisico antes la donacién.
“iEso es bueno!” Marisol asintid y luego pregunto, “zY Nina? gSe curara completamente después del trasplante?”
Antonio reflexion6 y dijo, “Eso todavia no se puede determinar. Si no hay recaidas después de cinco afios, se puede considerar una supervivencia a largo plazo. Si no hay recaidas después de diez afios, entonces se consideraria curada.”
“iCreo que Nina se va a curar!” pensando en la pequefia en la habitacién, Marisol hablé con seguridad. Los labios de Antonio se curvaron levemente.
Dando la vuelta en el pasillo, desde lejos, vieron a un hombre y una mujer dandose unos besos, o mas bien, era un beso apasionado. El hombre acorrald a la mujer contra la pared, sujetando su barbilla mientras la besaba con fuerza, y desde atras, parecia que queria devorarla.
Marisol chasque6 la lengua, “Antonio, su hospital es realmente algo. Ya me habia acostumbrado a los desordenes durante las guardias nocturnas, pero en pleno dia también hay espectaculo, Si me encuentro con esto otra vez, jvoy a querer traer una camaral”
“No son empleados de nuestro hospital, dijo Antonio con desgano.
Al oir eso, Marisol miré con mas atencion y efectivamente, no habia batas blancas ni uniformes de enfermeria; parecian ser familiares de algun paciente. El hombre vestia un traje negro y la mujer llevaba una ropa muy familiar.
Pronto abrié los ojos con incredulidad y sefiald, “;No es esa Gisela alla adelante? ~Y ese hombre... “Es Hazel,” dijo Antonio con calma.
{Marisol se asombro de nuevo!
Viendo al hombre con un traje qu
cortés?
marcaba sus musculos, ,dénde estaba aquel Sr. Pinales usualmente distante pero
Trag6 saliva y dijo seriamente, “Ahora estoy segura de que Hazel no es gay.”
Sin interrumpir a la pareja que parecia inseparable, Marisol fue arrastrada por Antonio al ascensor y después de que él terminara su turno con el médico residente, ambos se fueron en el carro.
Marisol vio que Antonio dirigia su Cayenne hacia el rio, en direccién opuesta a su casa, “Antonio, no vamos a casa?” “Nop,” Antonio sonrié con la boca.
“zEntonces a dénde vamos?” pregunté Marisol, confundida.
15-17
La mirada traviesa de Antonio brillaba en sus ojos encantadores, “Una cita cotidiana entre esposost
Marisol rad los ojos y se volvié hacia la ventana del carro, aunque a menudo la coqueteaba, cada vez su corazon latla mas rapido sin remedio.
jEra exasperante!
El Cayenne se detuvo en un restaurante francés a orillas del rio. Al parecer, una vez que se quitaba aquella bata blanca, Antonio era respetuosamente saludado con un “Antonio dondequiera que iba, y el gerente del restaurante personalmente los llevé a su mesa.
la
La cena francesa siempre es un poco complicada, con su entremés seguido de la sopa, luego el plato principal y el postre para finalizar, uno tras otro, pero definitivamente deliciosa.
Marisol clavo su tenedor en el pastel de marmol y, al levantar la vista, vio a alguien caminando hacia ellos con pasos decididos.
Lo que realmente resaltaba era el par de botas militares que llevaba puestas; en un ambiente como este, realmente llamaban la atencion. La camisa oscura y los pantalones casuales resaltaban su porte robusto. Ivo Pinales siempre hacia entradas llenas de vigor y tenia una presencia imponente.
Cuando la persona se acercé a la mesa, ella rapidamente llamo con respeto, “ilvo!” Antonio levanto la mirada y arqueo una ceja, “Ivo, gtambién viniste a comer?”
“Mm, algunos camaradas han vuelto del extranjero, jacabamos de reunimos!” Ivo se metié una mano en el bolsillo, y quizas por estar en la zona de no fumadores, el cigarrillo entre sus dedos no estaba encendido, “Mientras pagaba, el gerente me dijo que trajiste a una mujer, asi que vine a ver. jResulta que es Marisol!”
La comisura de los labios de Antonio se retorcid y dijo con el rostro sombrio, “Ivo, no es por criticar, pero ya no estas en el ejército, gno puedes dejar de usar botas militares todo el tiempo? {No pegan con este tipo de ambientes de lujo!”
“iT no entiendes! Ivo lo regafié sin cortesia, bajé la vista hacia las botas en sus pies, hizo una pausa y luego dijo con tono suave, “Alguien dijo que me veo tremendamente guapo cuando uso botas militares.”
*zAlguien?” Los ojos encantadores de Antonio se entrecerraron.
Marisol también se sintid intrigada, pero estaba segura de que esa persona tenia que ser una mujer, porque habla capturado un destello fugaz de sonrisa en el rostro generalmente serio de Ivo.
Ivo no contesto y en su lugar dijo, “Tengo otra mision con el ejército, asi que no me entretendré mas con ustedes. jMarisol, la proxima vez tenemos que comer juntos!”
“iClaro! jHasta luego, Ivo!” Marisol asintid obedientemente.
Parecia que Ivo realmente tenia una mision, ya que se alejo rapidamente después de hablar, su figura alta y musculosa fue haciéndose cada vez mas pequefia.
“iClack, clack!” El sonido claro resoné desde el plato frente a ella. Marisol desvid la mirada para escuchar la voz burlona de Antonio, “; Todavia estas mirando? jYa se fue lejos!”
Recién habia escuchado a Ivo mencionar que alguien dijo que se veia increiblemente guapo con botas militares, asi que no habia podido evitar darles un par de miradas extra cuando él se marcho.
Comparada con Hazel, el segundo hermano de Antonio, a quien habia visto mas veces, esta era la segunda vez que Marisol veia a lvo, el hermano mayor de Antonio. Haber visto a los tres hermanos Pinales en un solo dia, tenia que admitir que cada uno tenia un aspecto, personalidad, presencia y una impresion completamente distintos, pero cada uno era destacado a su manera.
“Antonio, he descubierto que tu hermano mayor es realmente muy ‘man!”
Marisol no podia parar de hablar, “No en vano es un militar, parece exudar una fortaleza y vigor por todos lados, un verdadero hombre de hierro, y ademas parece muy maduro. Aunque es algo serio, eso no resta nada a su atractivo masculino,caray, es como una fuente ambulante de feromonas!”
La mirada traviesa de Antonio brillaba en sus ojos encantadores, “Una oito cotidiana entre esposost
Marisol rodo los ojos y se volvié hacia la ventana del carro, aunque a menudo la coqueteaba, cada vez au corazon latla mas rapido sin remedio
jEra exasperante!
El Cayenne se detuvo en un restaurante francés a orillas del rio. Al parecer, una vez que se quitaba aquella bata blanca, Antonio era respetuosamente saludado con un “Antonio” dondequiera que iba, y el gerente del restaurante personalmente los Ilevé a su mesa.
La cena francesa siempre es un poco complicada, con su entremés seguido de la sopa, luego el plato principal y el postre para finalizar, uno tras otro, pero definitivamente deliciosa.
Marisol clavo su tenedor en el pastel de marmol y, al levantar la vista, vio a alguien caminando hacia ellos con pasos decididos.
Lo que realmente resaltaba era el par de botas militares que llevaba puestas; en un ambiente como este, realmente llamaban la atencion. La camisa oscura y los pantalones casuales resaltaban su porte robusto, Ivo Pinales siempre hacia entradas llenas de vigor y tenia una presencia imponente.
Cuando la persona se acercé a la mesa, ella rapidamente llamo con respeto, “ilvo!” Antonio levanto la mirada y arqueo una ceja, “Ivo, gtambién viniste a comer?”
“Mm, algunos camaradas han vuelto del extranjero, jacabamos de reunirnos!” |vo se metid una mano en el bolsillo, y quizas por estar en la zona de no fumadores, el cigarrillo entre sus dedos no estaba encendido, “Mientras pagaba, el gerente me dijo que trajiste a una mujer, asi que vine a ver. jResulta que es Marisol!”
La comisura de los labios de Antonio se retorcid y dijo con el rostro sombrio, “Ivo, no es por criticar, pero ya no estas en el ejército, gno puedes dejar de usar botas militares todo el tiempo? {No pegan con este tipo de ambientes de lujo!”
“iTU no entiendes!” Ivo lo regafid sin cortesia, bajé la vista hacia las botas en sus pies, hizo una pausa y luego dijo con tono suave, “Alguien dijo que me veo tremendamente guapo cuando uso botas militares.”
“zAlguien?” Los ojos encantadores de Antonio se entrecerraron.
Marisol también se sintid intrigada, pero estaba segura de que esa persona tenia que ser una mujer, porque habia capturado un destello fugaz de sonrisa en el rostro generalmente serio de Ivo.
Ivo no contesto y en su lugar dijo, “Tengo otra mision con el ejército, asi que no me entretendré mas con ustedes. jMarisol, la proxima vez tenemos que comer juntos!”
“iClaro! jHasta luego, Ivo!” Marisol asintid obedientemente.
Parecia que lvo realmente tenia una mision, ya que se alejé rapidamente después de hablar, su figura alta y musculosa fue haciéndose cada vez mas pequefia.
“iClack, clack!” El sonido claro resoné desde el plato frente a ella. Marisol desvid la mirada para escuchar la voz burlona de Antonio, “; Todavia estas mirando? [Ya se fue lejos!”
Recién habia escuchado a Ivo mencionar que alguien dijo que se veia increiblemente guapo con botas militares, asi que no habia podido evitar darles un par de miradas extra cuando él se marcho.
Comparada con Hazel, el segundo hermano de Antonio, a quien habia visto mas veces, esta era la segunda vez que Marisol vela a lvo, el hermano mayor de Antonio. Haber visto a los tres hermanos Pinales en un solo dia, tenia que admitir que cada uno tenia un aspecto, personalidad, presencia y una impresion completamente distintos, pero cada uno era destacado a su manera.
“Antonio, he descubierto que tu hermano mayor es realmente muy ‘man‘!”
Marisol no podia parar de hablar, “No en vano es un militar, parece exudar una fortaleza y vigor por todos lados, un verdadero hombre de hierro, y ademas parece muy maduro. Aunque es algo serio, eso no resta nada a su atractivo masculino, jcaray, es como una fuente ambulante de feromonas!” All text © NôvelD(r)a'ma.Org.
Capitulo 704 “zYa terminaste?” Antonio grufid con impaciencia. Capitulo 705
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