Capítulo 46
Capitulo 46
“Local ¡Eres un completo locol, Lucas le pegó una patada a Kent, pero de una los compañeros lo agarraron. “Lucas, este no es momento de perder la cabeza. Aunque no entiendo por qué Kent insiste en que él es el asesino, hay cosas que no cuadran“,
Lucas respiró hondo y se enderezo, Kent, de repente, con los ojos desencalados, se señaló a sí mismo: “Ful yo, yo la maté, maté a… a mi…”
El queria que lo mataran. Lucas frunció el ceño, pero se quedó en silencio: “Sigan investigando hasta que diga la verdad“.
Aunque Kent admitiera haber matado, tenia un diagnóstico psiquiátrico y un montón de coartadas, ¿cómo iban a condenarlo? Además, Felipe tenia al mejor equipo de abogados. Claramente, eso era un callejón sin salida.
Afuera todo era un revuelo, era Renán gritando como un loco, queria irrumpir ahi y acabar con Kent él mismo.
Yo estaba parada en la puerta del cuarto de Interrogatorio, ignorando los gritos de Renán. Ya no me importaba, ya no lo amaba, solo observaba a Kent con una mirada penetrante.
El confesaba que habla sido el asesino, pero algo no me terminaba de convencer. Por la golpiza, se le habia roto la chaqueta, Kent solo llevaba una camiseta de manga corta, sentado al lado de la mesa de interrogatorios, con el rostro pálido como un muerto, como un zombi.
En ese momento, parecia un muñeco de porcelana, demasiado hermoso para ser real. Me paré al lado de él, intentando descifrarlo, pero era imposible. Mi vista cayó en el dorso de su mano, con esos dedos
largos y atractivos, llenos de cicatrices de quemaduras, era como una pieza de porcelana inmaculada que había sido dañada y rajada.
Recordé esa mano, cuando me encerraron en una caja de madera, él agarró un hacha y se fue paso a paso. segui su mano con la mirada hacia arriba y mi corazón dio un vuelco.
Algo no estaba bien, el brazo de Kent no tenia ninguna marca ni cicatriz, y eso no podia ser. Antes de morir habla luchado con uñasy dientes, arañando al asesino por dentro del brazo hasta sacarle algo de carne. No habia pasado mucho tiempo desde mi muerte, incluso si sus heridas hubieran sanado deberian haber quedado cicatrices, esta situación no estaba bien.
Definitivamente, algo estaba mal, ¿tendría un cómplice?
*¡Hazte a un lado, déjame entrar, tengo que matarlo!“, Renán seguia gritando, fuera de control.
Miré atrás con sentimientos encontrados hacia ese hombre, que seguia ladrando como un perro rabioso. ¿no era él quien me habla llevado a esa situación?
Lucas, que ya no aguantaba más, le asestó un puñetazo, y por fin, todo se calmó.
“¡Lucas! ¡Lucas, lo encontramos, encontramos a Nayra!“, una policía entró corriendo, casi se cae.
Renán, con los ojos enrojecidos, agarró a la policia por los hombros, fuera de si: “¿Qué? ¿Nayra dónde está?“.
Lucas también se alteró, mirando a la policia: “¿Qué?“.
“Encontraron un sótano en el viejo orfanato abandonado, Nayra está ahi“, dijo ella.
Helda también se levantó corriendo: “Está viva, ¿verdad? Dime que está viva! No importa si no tiene ojos, con la medicina de hoy todo se puede, ¿verdad que está viva?“.
Capitulo 46
La policia no dijo nada, solo bajó la cabeza: “Lucas, mejor ven con nosotros“. Còntens bel0ngs to Nô(v)elDr/a/ma.Org
A Lucas se le heló el corazón y le echó una mirada significativa a Renán, éste se quedó paralizado en su lugar, de repente muy quieto..
Un silencio embargaba el lugar, un silencio que daba miedo.
“Siempre supe que ella no moriria, todo este teatro era para que yo me casara con ella“, murmuró Renán con ironia.
Quise reirme, pero ya no podia, solo queria ver mi propio cuerpo, ver en qué estado estaba.
“Helda, mejor no vayas“, le aconsejó la policia con buena intención. Pero ella apretó los dedos, con una mirada determinada.
La policia le dio una mirada a Lucas, y éste no dijo nada, eso era un si.
Yo había tenido un accidente y todos tenían que aceptarlo.